Cortesía de Mario Osiris (BENMORIN)
Catedrático de la Universalidad de Oaxacalifornia
Oaxaca de Juárez, Oax.- Ana Ignorásquez Colmenares vive en el delirio total: Cree que es una buena politóloga, extraordinaria mercadóloga, estupenda estratega, magnífica conferencista, afanosa emprendedora, exitosa analista… y el delirio más reciente: el de ostentar la Secretaría de Cultura de Oaxacalifornia.
El problema de decirle a los hijos que todo lo que hacen está bien, de no guiarlos, de no darles la pauta, de no reprenderlos, de ponerlos en un altar de fantástica perfección, es que se les vuelve mediocres, inútiles, y se les hace creer que son buenos para todo, hasta de lo que no tienen ni idea.
Me compadezco de ellos. Viven con un vacío descomunal que intentan llenar a diario con cosas materiales que, deliran, les va agregando algo de valor.
Ana Ignorásquez Colmenares imagina ser buena para muchas cosas. Dice “tener buen gusto”, y es por eso que odia que la obliguen a usar ropa tradicional oaxaqueña. Se pone los huipiles oaxaqueños con asco, y los porta con desdén, se nota, a pesar de los esfuerzos de ese otro talento que cree tener como formidable actriz.
Los delirios de Ana, en los primeros 100 días como secretaria de Cultura, han causado más estragos que los que podría ocasionar Carmen Salinas en el mismo cargo por 6 años.
¿No hay nadie del nuevo gobierno que le diga: “Ana, eres pésima como secretaria, no sirves, mejor por un changarro”? ¿De verdad que no hay nadie que se lo haga saber, aunque sea porque la quiere como amiga?
Para Ana Ignorásquez Colmenares no fueron suficientes 100 días sino tuvimos apenas con 20 para diagnosticarle una irrefutable incapacidad para el cargo… ¿Qué esperan para destituirla? ¿Esperan a que termine aplastando a la Cultura y las Artes de Oaxacalifornia?
Urge (no para mañana sino era para ayer), que Ana Ignorásquez Colmenares se destituida de inmediato a fin de evitar el riesgo de mayores perjuicios y más pérdidas de tiempo (ya tuvimos suficiente con sus antecesores). Si ella desea seguir viviendo de delirios, que los viva ella sola en su burbuja de mediocridad, de triunfos robados y éxitos de fantasía, pero no en una secretaría imprescindible para Oaxacalifornia.
Sicarú guyee
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