En riesgo las inversiones en el istmo
La “nueva” dirigencia en la Confederación de Trabajadores de México (CTM), “está sacando las uñas poco a poco”; Remigio Gómez Manubes, hizo acusaciones fantasiosas contra integrantes de la iniciativa Privada del puerto de Salina Cruz y los tildó de violentos.
En los últimos años y pese a no contar con la toma de nota, la dirigencia de la CTM se ha adjudicado contratos por medio de la extorción y violencia. Abusando de la protección institucional, el reducido grupo de cetemistas han enlodado el buen nombre del sindicato y la actual dirigencia va por el mismo rumbo. Al tiempo.
Meses antes de la caída del desequilibrado Hipólito Rojas, empresarios habrían acusado ante el gobierno federal al organismo sindical de violentar las garantías constitucionales de la ciudadanía y de los propios inversionistas, al extorsionarlos por medio de la violencia, propias de mentes enfermas que lideran la Confederación de Trabajadores de México.
Han pasado casi seis meses y la ciudadanía no puede olvidar la forma en cómo un grupo de vándalos y trasgresores de la Ley tomaron como rehén al municipio; usando las principales calles y avenidas como campo de batalla con el objeto de mantener sus mezquinos intereses, los agremiados cetemistas lastimaron a ciudadanos, maestros y empresarios.
Las cosas se repiten ahora con la nueva dirigencia a cargo de Remigio Gómez Manubes, pues en las infantiles declaraciones que se hicieron con respecto a integrantes de la Cámara Nacional de Comercio, tildaron a los empresarios de violentos y de no respetar los acuerdos cuando en realidad la CTM busca adjudicarse la carga de los empresarios de manera ilegal.
Es importante destacar que quien o quienes avalaron los cambios en la CTM del puerto de Salina Cruz, no deben de olvidar que se ordenó realizar la limpieza correspondiente al interior de ese organismo obrero, de tal forma de darle una mejor imagen a la de por sí deteriorada imagen que tiene ese sector sindical.
Que no se le olvide al gobierno del estado Alejandro Murat, en aquella reunión en la ciudad de México, junto con papá, fue quien ordenó hacer limpieza a la voz de ya, en la CTM en el estado, fue con el propósito de que las inversiones aterricen, sin riesgo alguno, sin embargo, la actual dirigencia no tiene toma de nota, busca confrontar nuevamente a la ciudadanía y lo que es peor, imponer la ley de Herodes, como se venía haciendo en el pasado.
Lamentablemente hoy vemos nuevamente que los esquiroles están volviendo hacer lo que hacía el padrino “Polo Loco” y que si no se toman cartas en el asunto, estarán dejando crecer a un tirano que después se les puede salir de control como el caso de Marco Antonio Sánchez Cruz, quien incluso, está relacionado con la delincuencia organizada, que impera por el estado.
La violencia con la que suele escenificar la CTM para arrebatar las cosas asustarán sin duda alguna a los empresarios que buscan invertir su capital en la zona del Istmo de Tehuantepec, por lo cual, sino se frena a tiempo, los empresarios buscarán otros estados en donde se respete el estado de derecho y se respeten las garantías constitucionales. Quien violente la ley debe ser sujeto a un debido proceso. De lo contrario, será más de lo mismo.