• Se trabajará con temas oaxaqueños para promover la paz, ya que nuestra entidad necesita de este valor fundamental
Por ALFREDO LUIS
Oaxaca de Juárez, Oax.- El coordinador nacional de la Embajada Mundial de Activistas por la Paz (EMAP), Francisco Guerra González, inauguró el Encuentro de Líderes Juveniles por la Paz, quien puntualizó que la educación es el arma más poderosa para cambiar al mundo.
Sostuvo que “a través de una educación integral es como se les dará a los jóvenes y niños las herramientas necesarias para resolver conflictos, emociones y aprender a vivir en sociedad y a eso se le apuesta en la Embajada”.
Convocó a los jóvenes que presenciaron este Encuentro a trabajar en favor de la paz, pues “tienen en sus manos la paz del mundo, pero para esto se tiene que construir todos los días y tiene que darse con la participación de todos los actores sociales” afirmó.
Por su parte, Saulo Chávez Alvarado, del Instituto de Historia y Geografía de la UNAM, sostuvo que es la primera ocasión que en Oaxaca se realiza este encuentro, pero la EMAP ha firmado convenio con todas las universidades de nuestra entidad así como del país.
Dijo que se trabajará con temas oaxaqueños para promover la paz, ya que nuestra entidad necesita de este valor fundamental, por lo que es impostergable incentivarla a cada momento, y para ello es urgente sembrar estos temas desde la educación básica y la familia.
Para finalizar, y teniendo como marco el emblemático Teatro Macedonio Alcalá, se realizó la firma de convenio entre instituciones juveniles y la Embajada Mundial de Activistas por la Paz.
Dentro de las personalidades que participaron en este magistral evento se encontraron Olivetti Paredes Zacarías, directora del Instituto de la Juventud Oaxaqueña; Eduardo Carlos Bautista Martínez, rector de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca; Gloria María Abarca Obregón, representante de la cátedra UNESCO; Miguel Pacheco Santiago, así como diferentes representantes de organizaciones ocupadas en el tema.
La EMAP se constituyó en el año 2012 por el activista William Soto Santiago y tiene como misión trabajar por la superación, el bienestar, la felicidad y la paz de la familia, promoviendo la formación del ser humano integral y de Activistas por la Paz mundial, en el marco de los valores y principios universales para la defensa de los Derechos Humanos.
Con el apoyo de voluntarios, la Embajada Mundial genera acciones para el fortalecimiento de los principios y valores universales, además del reconocimiento de la dignidad del ser humano, con el fin de fomentar espacios para el entendimiento entre personas de diferentes orígenes, culturas, nacionalidades, creencias y religiones.
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